¿DONDE ESTAS?

Llevo días preguntandote: "¿donde estás?". El silencio es la única respuesta que recibo y sigo insistiendo: "Dios mio ¿donde estás?". Cuando vivo días sin penas ni glorias ..., cuando en el alma hay apatía ante las horas y los minutos ..., cuando el alma parece que se ha puesto a invernar ..., ¿donde estás que no te encuentro?, rebusco en mi interior y parece un desierto donde solo las arenas que van y vienen movidas por el aire de la rutina dejan vislumbrar que aun vivo.

Los acontecimientos en estos momentos pasan sin más pena ni más gloria y me hacen pensar si sirvieron para algo. ¡Bueno! ..., pensaré en que el sueño repara fuerzas para seguir luchando y que estos momentos son simple y llanamente momentos de relax del alma.